Un Nuevo Foco De Investigación
Lo que hacen la mayoría de los productos que conocemos para combatir el acné es atacar los efectos del mismo. Lo que yo debía encontrar es la forma de combatir la causa. Esto es, llegar al origen del problema.
Decidí comenzar a investigar sobre hormonas y fue allí cuando descubrí la solución natural para el acné. Nada de cremas, nada de lociones ni costosos tratamientos.
Debía probarlo para asegurarme que funcionara. ¿Quién mejor que yo para ser el que probara este nuevo y revolucionario sistema?
La Hora De La Verdad
Comencé el tratamiento y a los pocos días ya pude ver los primeros resultados. No había pasado una semana y mi piel ya se encontraba 100% libre de acné. Ahora no sólo había liberado mi piel del acné, sino que la misma se encontraba radiante, lisa y humectada. Mi alegría era enorme!
Ahora, lo único que debía hacer era dejar pasar el tiempo para ver si esta solución era permanente. Los meses pasaron y mi piel se encontraba intacta. Sabía que había hecho un gran descubrimiento.
Seguí haciendo pruebas con amigos, familiares e incluso gente con acné que me cruzaba en la calle!!! Tenía la necesidad de ayudar a la gente. Quería que todos dejaran de sufrir.
Debía que buscar la forma de llegar a más gente, ya que mi método no había mostrado fallas y había sido efectivo en todas las personas en que lo había aplicado, sin importar el sexo, la edad o el tipo de piel. Simplemente funcionaba!
Las muestras de agradecimiento eran infinitas. La gente sentía que esto realmente les había cambiado la vida. Lo llamaban “El Milagro”.
Fue en ese momento cuando se me ocurrió hacer un libro y llamarlo “Milagro Para El Acné”.
Me dijeron que una editorial difícilmente lo publique ya que estaba revelando un secreto que enojaría a mucha gente y que les haría perder millones de dólares.
Miles de personas ya lo han probado con un éxito rotundo.
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